¿Recuerdan los reclamos de Martha Meier Miró Quesada por el anuncio que hizo El Peruano de que el lunes 21 de abril publicaría un suplemento especial dedicado a Gabriel García Márquez?  

Cuando leí la noticia pensé que tan desatinado comentario se debía a una sola razón: el suplemento anunciado le hacía competencia al que ella pensaba dedicar exclusivamente a Gabo hoy. Bueno, si con ese tuit histórico la editora central de El Dominical de El Comercio se disparó a los pies, con el suplemento que sacó hoy día le disparó a la memoria del pobre García Márquez sin pena ni remordimiento.

No sé qué novelas de Gabriel García Márquez cree que ha leído la toda sapiente editora de El Dominical, pero definitivamente no son las que escribió Gabo. O por lo menos no las que ella recomienda hoy. Lean lo que escribe sobre "El amor en los tiempos del cólera":

"Florentino Ariza y Fermina Daza se aman, pero ella se casa con Juvenal Urbino. Al morir este, y tras casi 51 años, Florentino y Fermina hallan el camino libre".

Sí, aunque usted no lo crea. Y el de "Crónica de una muerte anunciada" no es menos cómico y sorprendente:

"Bayardo San Román tras su matrimonio devuelve a su mujer por deshonrada [sic] a su casa. Señalado como su primer amante, Santiago Nasar espera la muerte".

No contenta con esto, el “escritor y periodista” Santiago Bullard, en su nota sobre “El periodista Gabriel”, se deja llevar por el entusiasmo y asciende de rango al protagonista de la novela “El coronel no tiene quien le escriba” y lo hace general (pág. 13). Pero sí cree que esto es más que suficiente para que Gabo se vuelva a morir de pena con el ‘homenaje’ que le rinde Martha Meier, lea lo que la propia editora escribe en su nota sobre GGM y el cine:

"Pese a esto Gabo no fue consciente de su capacidad de crear cine en formato de novela...". Hasta ahora estoy tratando de dilucidar qué quiso decir con esto si, palabras más adelante, escribe: "como él mismo dice", refiriéndose a la utilización de los recursos del punto de vista y los encuadres que utiliza en "Cien años de soledad" y "El coronel no tiene quien le escriba" que el propio GGM señala que utilizó en esas novelas. ¿De qué cosa no es consciente entonces García Márquez? ¿O de qué cosa no es consciente Martha Meier?

En todo caso, de una burrada de las muchas que escribió por lo menos sí se dio cuenta a tiempo de corregir (por lo menos en la versión electrónica): cuando llama “su gran amigo” a Plinio Apuleyo Mendoza luego que lo calificara de “inefable” en la versión impresa.

Con homenajes como estos, mejor habría sido publicar solo cables, Martha.